Se dice que no hay distancia sin un destino. En este caso tengo que decir que sí, que existe la distancia; porque yo tengo miles de destinos.
Mi destino es hacerte sonreír cada día, hacer que te olvides de todo lo malo cuando estas junto a mi, que tu rutina sea darme amor, como tú y yo sabemos. Mi destino puede cambiar, y no depende de ti ni mucho menos, si no de mí.
Suena un poco egoísta hablar solo de "mi" destino, porque en realidad es el "nuestro" y nada ni nadie podrá romper está fusión, porque es IRROMPIBLE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario