Zenit

"Lucha por tus ideales, insiste, se tenaz, lánzate sobre tu presa como un ave rapaz."

domingo, 26 de agosto de 2012

Cuando decides que nada puede hacer sentirte bien, o simplemente mejor. Ese momento en el que sabes que lo único que necesitas es estar al lado de esa persona, la única capaz de sacarte una sonrisa, o de secarte unas burdas lágrimas. Pero es ese justo el momento en el que te detienes y piensas que no puede ser, que esa persona no puede acompañarte, ya sea porque ya no este en el mundo, o simplemente por la maldita distancia. Es en ese momento cuando decides sentarte a esperar que algún día volváis a estar juntos, mientras tanto esperas que sean felices, allá donde estén.



Te necesito.

miércoles, 15 de agosto de 2012

''Empezaba a aceptar que ya no estabas. Que tú tenías tu vida, y yo la mía. Muy diferentes aunque paralelas al mismo tiempo, siempre creí que nuestros caminos no volverían a juntarse, como esas líneas trazadas en un papel, líneas que se ven, pero no se pueden tocar. Líneas cuyo destino no es ser una. Empecé a superarlo, de veras. Pero hoy me has sonreído, y lo has estropeado todo.''


sábado, 11 de agosto de 2012

..♥..

Le gusta cómo mira hacia ninguna parte cuando se distrae y cómo resopla y muerde el lápiz cuando no entiende alguna explicación. Le gusta como camina, firme, decidido, elegante, pero al mismo tiempo vergonzoso cuando se siente observado. Le gustan sus ojos verdes y su pelo oscuro. Le gusta su voz, ni fina ni grave, y cómo sonríe cuando esta alegre, torciendo un poco la boca hacia la izquierda. Pero lo que más le gusta es su manera de ser.

miércoles, 8 de agosto de 2012

Te quise, te quiero y te querré.

Hace una semana y dos días, el 30 de Julio, se fue una de las personas más importantes de mi vida, mi yaya.

Siempre las abuelas son importantes en la vida de las personas, pero mi yaya no era una abuela cualquiera. Para mi ha sido una madre, una amiga, un todo. Puedo decir muy segura que he tenido la mejor yaya del mundo, del universo, y de todos los sitios posibles...Sé que ella querría que yo estuviera feliz, que siguiera feliz, como cuando estaba ella conmigo, pero lo siento yaya, no voy a ser igual, no sin ti.

Mi yaya, me ha dado de comer desde pequeña, hasta diciembre del año pasado. Yo salía de clase, y lo primero que hacia era ir a casa de mi yaya, ella me recibía cada uno de los días con el plato de comida hecho, sólo me cocinaba lo que me gustaba para que comiese. Sé que hay momentos que se hartaba de mi y mis especialidades con la comida, pero ella seguía ahí, a pesar de todo. Cada vez que llegaba de clase, me preguntaba qué tal me había ido, y que había pasado, yo le contaba todos los cotilleos y todo lo que pasaba, ella daba su opinión, a veces se sorprendía de como podemos llegar a ser los adolescentes, pero otras se reía. Y no sabéis la sonrisa que aparecía en mi cara sólo con verla reírse gracias a mis tonterías.

Nunca pensé que viviría esto, pero por desgracia te has ido, y no me pude despedir como quería de ti. Fue todo tan rápido. El 21 de Julio fue mi cumpleaños, el 24 fui a verte, estabas tan guapa como siempre, estabas bien, te reíste con nosotros, y me dijiste ''¿Qué quieres por tu cumpleaños? Lo que quieras te lo regalo.''  El día 29 te pusiste mala, fui a verte, las cosas mejoraron, me despedí de ti llorando, con un 'Adiós yayi', y el día 30 a la hora de comer fui a verte, ilusionada porque tenía pensado lo que te iba a pedir por mi cumpleaños, te iba a pedir que te pusieses buena, que eso era lo único que quería...Llegue al hospital y me dijeron 'Ahora te van a dar una mala noticia, pero no puedes estar triste, tienes que ser fuerte.' En ese momento mi mundo se rompió, sólo quería verte y comprobar que era todo una broma, no pude para de llorar, pero yaya, entiéndeme, lo eras, eres y serás todo para mi. En ese momento sentí, como todo mi corazón se rompía, no quedaba nada dentro, se había parado. Me sentí sola, como ahora, porque sin ti mi mundo ya no tiene sentido, ninguno.
Sólo quiero decirte que no te olvido, que cada una de mis lágrimas son por ti, porque te necesito, porque me iría contigo, y porque aunque me duela sé que te fuiste feliz.

Se feliz allá donde estés, y ten por seguro que algún día volveremos a estar juntas.
Descansa yaya.

Te quiere, tu mala leche.